“En los días de su vida mortal, Jesús ofreció oraciones y súplicas con fuerte clamor y lágrimas al que podía salvarlo de la muerte, y fue escuchado por su reverente sumisión. Aunque era Hijo, mediante el sufrimiento aprendió a obedecer;”
Hebreos 5: 7-8
El primer Adán quiso ser como Dios y creer que la desobediencia no lo llevaría a la muerte. Ahora Cristo debía de entender que como hombre era menor a Dios, y que debía asumir la muerte por el pecado de la humanidad, que venía desde el primer Adán y por las generaciones futuras.
Cuando Cristo estuvo en la tierra el fue cien por ciento hombre. Este pasaje lo deja claro, dice que aprendió la obediencia, y es que Adán a través de la desobediencia trajo el pecado al mundo, por esta razón Cristo no podía fallar desobedeciendo, si fallaba en esto, todo estaría perdido para nosotros. Aunque era hijo aprendió a obedecer por el sufrimiento ¿Cuantos de nosotros estamos viviendo las consecuencias de la desobediencia?
El Señor Jesús a medida que transcurría su vida ministerial, ofrecía oraciones, súplicas, clamaba y tenía que poner fe en la palabra de Dios, pidiéndole al padre que lo resucitara. (que lo salvará de la muerte). ¿Por qué?, por qué era cien por ciento hombre.
Isaías 53:10 – 11
“Pero el Señor quiso quebrantarlo y hacerlo sufrir, y, como él ofreció su vida en expiación verá su descendencia y prolongará sus días, y llevará a cabo la voluntad del Señor. Después de su sufrimiento, verá la luz y quedará satisfecho; por su conocimiento mi siervo justo justificará a muchos y cargará con las iniquidades de ellos.”
“pero el mundo tiene que saber que amo al Padre, y que hago exactamente lo que él me ha ordenado que haga…”
Juan 14:31
“Porque, así como por la desobediencia de uno solo muchos fueron constituidos pecadores, también por la obediencia de uno solo muchos serán constituidos justos.”
Romanos 5:19
“Pero quien se fija atentamente en la ley perfecta que da libertad, y persevera en ella, no olvidando lo que ha oído, sino haciéndolo, recibirá bendición al practicarla.”
Santiago 1:25
Para el pueblo del Señor estamos en la semana 69 de las 70 de Daniel, (Daniel capítulo 9:24), ellos tienen semanas de días, semanas de años. Las semanas para el pueblo de Dios son semanas de 7 años,
7 semanas = 49 años, desde que se promueve el edicto de Ciro, rey de Persia hasta la reconstrucción del templo y de Jerusalén
62 semanas = 434 años, desde la reconstrucción de Jerusalén, hasta la crucifixión de Cristo. Cesan los sacrificios judíos.
Total 483 semanas.
Queda una semana = 7 años, para los 490 años de las 70 semanas, esta semana se cuenta, desde la aparición del antiCristo, hasta la segunda venida del Señor.
Debemos tener en cuenta:
Leamos Mateo 24:14 “Y este evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin”, esa es una señal de que la iglesia ya no va a estar, por la predicación del evangelio del reino que es para el pueblo judío.
Estamos en el tiempo de los gentiles. ¿Cuándo terminará? Romanos 11:26 – 1 de Tesalonicenses 4:13-18
¿Cuál será la señal de los Judíos.
¿Cuál será la señal de su venida?
¿Cuál será la señal del fin del mundo?
La señal del fin del mundo está en Mateo 24:14-31, termina el evangelio gentil y comienza el evangelio para los judíos.
El evangelio del reino, fue el que el Señor Jesucristo predicó a los judíos.
Mateo 3:1-3 – Mateo 4:12-17,23 – Mateo 12:28 – Juan 1:11-12
Dios nos ha llamado a ser obedientes a su Palabra. Podemos saber qué piensa acerca de las cosas porque Él nos lo dice en su Palabra. La meta del ministerio debería ser el formar un pueblo obediente. Esa ha sido siempre la intención de Dios tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento.
Es triste que cuando algunas personas se ven confrontadas con la verdad divina que los convence de algo que no es correcto en sus vidas, ellos siguen en su camino de desobediencia.
Alguien dirá: “Yo voy al templo. ¿No es eso suficiente? Primera Samuel 15:22 dice: “Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios”. El ritual nunca puede reemplazar a la obediencia. En 1 Pedro 1 el apóstol dice: ”Ceñid los lomos de vuestro entendimiento” (v.13).
En otras palabras, estén seguros de que sus prioridades están en buen orden. “Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia” (v. 14). No vivan en la manera que vivían antes de ser cristianos. Tienen que ser hijos obedientes.
Jesús dijo: “Antes bienaventurados los que oyen la Palabra de Dios, y la guardan” (Lc. 11:28). Pablo, al elogiar a los cristianos de Roma, dice: “Porque vuestra obediencia ha venido a ser notoria a todos, así que me gozo de vosotros” (Ro. 16:19).
Debemos comprometernos a obedecer la Palabra de Dios. Si el Espíritu le enseña a usted una verdad, aplíquela. Cuando se sienta tocado en su consciencia por la verdad, no diga: “Cuánto me hubiera gustado que tal persona hubiera escuchado este sermón”. Aplique el mensaje a su propia vida. Cuando usted obedece a Cristo, crece en madurez espiritual y se hace más útil en las manos de Dios.
Iglesia Cristiana EL Pacto | Sermón: "Hacedores de la Palabra"